Un nuevo actor ha irrumpido con fuerza en el mercado eléctrico de España. Hace unas semanas, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) promovió, bajo el lema “Quiero pagar menos luz”, una plataforma para la compra colectiva de luz que prometía descuentos de hasta 200 euros en el recibo anual. La iniciativa, denominada switching, que ya ha triunfado en otros países de Europa, ha recibido también en España una respuesta contundente. Se apuntaron nada menos que 477.564 hogares.
Las grandes eléctricas que operan en España (Iberdrola, Endesa, Gas Natural Fenosa, E.ON España y HC Energía) no correspondieron a la respuesta ciudadana y dieron la espalda a la subasta de electricidad. No así las pequeñas comercializadoras. Una de ellas, Holaluz.com, se llevó el gato al agua.
Basta una llamada de teléfono o rellenar un formulario en Internet para decir adiós a las grandes eléctricas de siempre y contratar la tarifa con alguna de las cooperativas o pequeñas comercializadoras que van ganando terreno empujadas por la indignación ciudadana.
Todavía son una minoría los ciudadanos que dan este paso, pero una minoría cada vez más grande. En el último año, la cooperativa SomEnergía prácticamente duplicó su número de socios, superando los 12.000. Y la empresa HolaLuz.com tuvo que ampliar su plantilla para acoger a más de 25.000 clientes nuevos tras ganar la subasta colectiva organizada por la OCU para conseguir una luz más barata. Ambas comercializadoras venden "energía verde" (el dinero que se paga va destinado solo para electricidad de origen renovable). Hay más: Gesternova, Zencer, GoiEner, Enercoop...
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